Siguiendo con el leit motiv de la cadena que motiva a reconectar y conectar con el espacio y la ancestralidad, el centro de bienestar es un homenaje a la la cultura maya que se yergue en un espacio donde el lujo y la sencillez van de la mano.
Tierra, agua, sonidos: lo que se vive en el SPA de Etereo Riviera Maya
El epicentro del wellness center es un jacuzzi con hidromasaje que evoca a los cenotes de la Península. El agua, templada, se mueve y burbujea para dar una primera bienvenida a quienes buscan un momento de relajación.
Alrededor de él, varias puertas a las que se puede entrar ya sea en orden o de acuerdo a la disponibilidad de cada una. Todas con elementos mayas, despiertan alguno de los sentidos para relajarlo y reconectar después de la experiencia.
Una fonoterapia con cuencos, una exfoliación con arcilla blanca, un ritual de cacao facial y los clásicos baños de presión son parte de la experiencia. Los detalles imperan, todo es impecable.
Al salir de cada estación, reciben toallas calientitas y una estación de SPA water y algo de fruta para refrescarse. El wellness center también tiene espacios para masajes y faciales, además de un sauna y un baño de vapor. Para completar el cuadro hay otra alberca tibia de donde emergen chorros de agua para relajar los músculos de la espalda y un cubo frío para contraer los músculos y terminar la experiencia.
Cada una de las experiencias está guiada por el personal que da, cada uno, su toque particular al storytelling. Todos coinciden en algo: hay mucha magia en la interpretación del bienestar de la cultura maya y asimismo, la paz está en cada uno de los elementos que presentan.